Eli Aguiriano es una de las 10 personas con discapacidad intelectual que se incorpora como trabajadora a un centro escolar de Gipuzkoa. La idea es que el próximo curso, otras 20 personas se incorporen en centros de Bizkaia y Araba gracias al acuerdo alcanzado entre el Departamento de Educación del Gobierno Vasco y Atzegi, la asociación guipuzcoana en favor de las personas con discapacidad intelectual.

La azpeitiarra Eli Aguiriano es todo un ejemplo. Siendo una chica con discapacidad intelectual, ha conseguido trabajo de ayudante en la escuela Iraurgi de Azpeitia. Su contrato ha sido posible gracias al convenio de colaboración entre el Departamento de Educación y Atzegi, asociación guipuzcoana en favor de personas con discapacidad intelectual. El acuerdo de colaboración firmado el pasado mes de octubre facilitará que otras 29 personas como ella se vayan incorpoprando paulatinamente a diferentes centros para echar una mano como ayudantes para distintas tareas. Este hecho es especialmente relevante porque supone una oportunidad laboral para las personas con discapacidad intelectual y no solo eso, sino que supondrá el desarrollo de sus proyectos de vida y una mayor integración en su entorno a través de su ocupación. 

Las personas 30 personas que tendrán la oportunidad de trabajar en centros educativos (tanto públicos como concertados) de Euskadi se irán incorporando durante los próximos meses y cursos escolares. Está previsto que las primeras 10 contrataciones se realicen durante este curso 2023-2024 en otros tantos centros de Gipuzkoa (5 públicos y 5 concertados). Se trata de personas que ya venían prestando su colaboración en centros educativos y a partir de ahora contarán con un contrato laboral. La intención es extender posteriormente la iniciativa a Araba y a Bizkaia con nuevas incorporaciones. Las escuelas, los institutos, las ikastolas, se convierten así en lugares donde se favorecerá la inclusión social de personas con discapacidad.